Después de los comentarios recibidos en mi post anterior he dudado si escribir éste, o no. No quisiera que los lectores empezaran a odiarme y a realizar ritos vudús contra mi persona. Aún así, ahí va:
Del 10 al 25 de febrero se está celebrando el
Flamenco Festival London, lo que viene a decir, el Festival de Flamenco de Londres, con actuaciones de Vicente Amigo, Enrique Morente, o la bailaora cañaílla por excelencia, doña
Sara Baras. Todas las actuaciones son en el
Sadlers Wells, un teatro en Clerkenwell, cerca de Angel.
Esta noche era el último día de la actuación de Sara Baras, que venía con su nuevo espectáculo,
Sabores. En cuanto supimos que Sara venía a Londres, Evelyn y yo íbamos a ir, de cualquier forma, incluso pagando, pero en cambio fuimos invitadas. Es lo que tiene tener una madre cañaílla, y que conoce a media bahía de Cádiz. Gracias a los contactos de la tierra, Tano Pereira, padre de la artista, al que desde aquí agradezco enormemente, nos invitó personalmente (entradas reservadas para familiares/amigos/conocidos/o gente afortunada como yo) y lo vimos de gorra. Y en sitio estupendo. Mil gracias, mami, por tejer tu telaraña de influencias para hacerme este gran regalo a distancia. Como curiosidad diré que justo en el asiento de al lado, teníamos al corresponsal de TVE en Londres. Sí, ese, el de las gafas. Parece más alto en la tele.
Bueno, después de esta larguísima introducción, debería pasar a contar un poco el espectáculo en sí, pero se me hace muy difícil. Sin palabras, sería una buena aproximación. Impresionante. Emocionante. Bello. Ver bailar a esa mujer, y a su compañía, es un regalo para los sentidos. Y encima es simpática y salerosa. Olé, olé y olé.